Europa apuesta por la cautela

in Cuaderno de Cuba, de Alejandro Armengol

LA UNION EUROPEA ha optado por la cautela. Sin embargo, esto no quiere decir que no esté dispuesta a ayudar a la Isla si el gobierno cubano emprende cambios que lleven a la democracia. Así lo expresó en esta ciudad el académico Joaquín Roy, catedrático y director del Centro de la UE de la Universidad de Miami. "En cuanto se confirme la senda hacia alguna transición bien establecida habrá un acrecentamiento" de la oferta que ha formulado la Unión Europea (UE) a Cuba de beneficiarse del llamado Acuerdo Cotonú, dijo Roy según un cable de la agencia Efe. El convenio Cotonú regula las relaciones entre la UE y el grupo Africa, Caribe y Pacífico (ACP). Cuba aunque es miembro pleno no es signatario del acuerdo. El académico español señaló que cuando se vislumbre un proceso de transición real, esa seguirá siendo la oferta europea y "si se desgaja y puede ser ampliada hacia uno de los convenios (comerciales) como los que la UE tiene con Centroamérica, lo hará"."Para ello no cabe la menor duda de que contará con la presión de ciertos países que tienen unos intereses muy legítimos, muy históricos, y éste es el caso español", añadió el experto. Roy analizó esas relaciones en un debate en la Universidad de Miami sobre Las relaciones entre la UE y Cuba antes, durante y después de la crisis de la enfermedad de Fidel Castro. La estrategia política y económica del régimen cubano marcha actualmente por un rumbo completamente opuesto a un mejoramiento de sus nexos con Europa. De momento, La Habana está apostando a China y Venezuela y considera que puede prescindir de la ayuda europea. Se trata de un nuevo giro, iniciado hace poco más de tres años, en las relaciones entre Europa y Cuba, que siempre se han caracterizado por los altibajos; aunque en los momentos en que éstas han estado más bajas por lo general no han llegado a la tensión que caracteriza los pocos vínculos de la Isla con Washington. En marzo del 2003 parecía que Cuba dejaría de ser pronto el único país de América Latina sin acuerdos comerciales con los Quince e ingresaría en Cotonú. Una delegación europea llegó a La Habana confiando en el establecimiento de un marco comercial preferente entre la Unión y el Grupo ACP (Asia-Caribe-Pacífico). Pero poco tiempo después, en abril, las críticas de la UE contra la campaña represiva que estableció largas condenas de cárcel para 75 disidentes y la ejecución de tres secuestradores de una lancha de pasajeros tras un juicio sumarísimo, desencadenaron la ruptura. En protesta por lo que consideraron una violación de las libertades y los derechos fundamentales en la isla, los miembros de la UE aprobaron en junio un paquete de medidas que incluía limitar las visitas gubernamentales de alto nivel, reducir su participación en las manifestaciones culturales e invitar a disidentes a las embajadas en sus fiestas nacionales. El gobierno cubano respondió congelando las relaciones bilaterales y retirando su solicitud de ingreso a Cotonú. En su discurso del 26 de julio de ese año, Castro anunció la renuncia a las ayudas al desarrollo de la UE (unos 17 millones de euros, según cifras de la Comisión Europea). Aunque posteriormente la UE modificó la política de invitar disidentes a las fiestas en la embajada, el propio Fidel Castro ratificó en más de un discurso la renuencia de Cuba de buscar la ayuda europea. Roy explicó a la agencia Efe que mientras exista la actual situación en Cuba, no se verá un ''movimiento arriesgado'' por parte de los europeos. "Se ha dado una posición de cautela (por parte de la UE), de más cuidado que antes porque se considera que no es el momento para acrecentar la insistencia en ciertos aspectos porque el momento es delicado", manifestó el catedrático.

Entre los libros publicados por el profesor Roy se encuentran La Siempre Fiel: Un Siglo de Relaciones Hispano-Cubanas,1898-1998 (Universidad de Madrid, 1999) y Cuba, the U.S. and the Helms-Burton Doctrine(University of Florida Press, 2000).